Disco lleno

Mi disco duro está lleno. Eso es lo que me dice mi ordenador mediante unos cuadros de diálogo que me muestra constantemente. Creo que este portátil es una extensión de mi cerebro. Está saturado y parece que, a pesar de ello, todo el mundo se empeña en hacerme forzar la máquina. Tal vez pienso demasiado.

Olvido

Este post es simplemente un intento de evitar que este blog se vaya a la deriva. Aprovecho uno de esos momentos en que tengo la sensación de no existir para nadie, para rescatar a este diario del olvido. Egoísmo puro y duro. Sólo utilizo éste, mi particular saco de mentiras, para no caer en el olvido, mi olvido, no el suyo.

Vuelvee...!

Aunque la iluminación navideña no sea espectacular (que sepáis que el árbol no sólo es artificial, sino que ni siquiera simula tener ramas y esas cosas que debería tener cualquier árbol) y haya una terracita de cafetería en medio de la plaza de España pleno invierno y lloviendo, tengo ganas de volver a Avilés por Navidad. Después de pasar catorce horas en un tren, el viernes por la mañana por fin estaré en casa.

Doble vida

A veces creo que mi vida virtual se aleja de mi existencia real hasta un límite peligroso. Corro el riesgo de que mi alter ego cibernético adquiera vida propia. Y lo digo porque hoy he tenido la oportunidad de conocer a dos personas, a las que veo casi a diario y con las que hasta ahora apenas había intercambiado cuatro palabras, a través de sendas conversaciones internáuticas (no simultáneas). Empieza a preocuparme que mi yo mentiroso -internet es lo que tiene, nada es lo que parece- acabe por ser más humano que yo.

Amigos fieles

Desconocidos

Salí de clase con esa sensación de alivio que se apodera de una cuando se da cuenta de que está a punto de salir relativamente airosa de una de esas semanas estresantes, llena de exámenes, prácticas y trabajos en grupo en los que unos curran, otros dan la cara y el resto se limita a fingir que ha hecho algo. Caminé hacia la estación de tren, respirando el, a esas horas aparentemente más respirable, aire de la gran ciudad, con el olor a zoo y a otoño tardío de la Ciutadella. Ya en el andén, se me acercó un hombre de mediana edad que me dijo "perdoni, pèro té un aspecte esquisit" (o algo parecido, que mis escasos conocimientos de catalán me hicieron interpretar así). Mi reacción natural fue dedicarle una de esas miradas que denotan una mezcla de asco y desprecio absoluto, a lo que el hombre sólo pudo responder con una segunda y una tercera disculpa. Me alejé de aquel potencial agresor sexual y me senté en un banco rodeada de extraños. Mientras intentaba descifrar (sin éxito) la conversación telefónica en inglés de un ejecutivo que gitaba, convencido de que nadie le entendía o de que a nadie le interesaba lo que decía, me percaté de que aquellas habían sido las únicas palabras amables que alguien me había dirigido en todo el día, y tal vez en semanas. Y yo, no sólo no se lo agradecí, sino que me aseguré de que el pobre hombre se sintiera un ser miserable. Pensé volver para darle las gracias, pero claudiqué de esa posibilidad, ya que lo único que conseguiría sería que ese desconocido me tomara por loca. Entretanto, gracias a mi indecisión, se subió a un tren con destino a Mataró.

89 inviernos

Ésos son los que ha cumplido hoy mi abuela. Hemos tomado chocolate caliente para celebrarlo. A ella le gustó más la bolsa de Bershka que la bufanda que le regalé. Para que la proteja del frío de muchos más inviernos. ¡Felicidades!

¿Blanca Navidad?

Más de la mitad de las reservas para este puente en los puertos de montaña de Asturias han sido anuladas. En esta imagen, publicada hoy en La Nueva España, se puede ver la estación de Pajares sin su habitual manto blanco. El telediario anuncia que hoy se han producido las primeras nevadas de la temporada en España. Tarde, demasiado tarde. El calentamiento global avanza y nosostros seguimos sin darnos cuenta de que está en nuestras manos frenarlo.

Pasear por el Portal del Ángel (calle llena de tiendas de Barcelona) viendo la iluminación navideña y gente comprando regalos compulsivamente en camiseta de manga corta se me hace un tanto extraño. ¿Qué hay de esas navidades blancas de las postales?

Palillos

Primera cena de clase. División China vs. Japón. Relación hostil. Escasas conversaciones bilaterales. Restaurante coreano como escenario. ¡¡¡¡356 €!!!! Y yo, la única paleta que tuvo que pedir un tenedor, imperdonable pero es lo que tiene ser de pueblo... Me llevé los palillos para ensayar. En la próxima cena estaré a la altura.

Preludio

He perdido la cuenta de los tantos amagos que he hecho de dar a luz a un blog, pero supongo que mi tendencia a ir contra corriente los ha condenado al fracaso. Pero la vocación manda y aquí estoy, el río vuelve a su cauce. Mi propósito esta vez es que esta sarta de mentiras y medias verdades tenga una larga vida, por el momento aquí están sus primeras palabras....